Señor venimos ante ti, con nuestros corazones rotos pero con nuestras almas llenas de júbilo. Porque preguntas? porque tú hijo Ignacio querido apreciado amado esposo, padre y abuelo por fin esta ante tu presencia y gloria. Señor nos dejas con un gran dolor y un inmenso hueco en nuestra familia que no se podrá llenar nunca más. Pero entre el dolor y lagrimas también nos dejas tantos recuerdos de nuestro amado Ignacio, esos recuerdos y experiencias que ni la muerte nos puede arrebatar de nuestro ser. Te pedimos señor que nos guíes por este dolor hacia la paz, esa paz que sabemos y confiamos nuestro padre Ignacio vive en plenitud ahora que está cercas de tu inmensa luz. También queremos señor que le des eterna felicidad y que no lo dejes que se preocupe por nosotros. Con tu luz y nuestra Fe puesta en ti, sabemos que estaremos bien hasta que tú decidas reencontrarnos con nuestro amado Ignacio. Su responsabilidad como esposo padre y abuelo a terminado aquí en la tierra. Señor dale paz y gloria y cuando necesitemos de el sabemos que tan solo tenemos que voltear a nuestros corazones y recuerdos para encontrarlo nuevamente. Te amamos tanto Ignacio! Tarde o temprano nos volveremos a ver, y nos volveremos a amar. Tù esposa tus hijos y nietos te recuerdan y aman traspasando todo tipo de fronteras incluyendo la misma muerte. Descansa y vete con nuestro señor en Paz, que tu viaje ahora continúa en el paraíso.
Amén